La relación entre la Ciencia Ficción y la Izquierda va a las raíces del género mismo. Muchos de los autores más populares y respetados de la Ciencia Ficción han pertenecido a una larga tradición de polemistas o comentaristas que utilizan sus obras de ficción como un medio para criticar el actual sistema socio-económico y sugerir posibles alternativas al mismo. Asimismo el estudio crítico de la Ciencia Ficción ha tendido a provenir de la Izquierda del espectro político como por ejemplo departamentos o programas de estudios de ciencia ficción, como una sub-disciplina académica, surgió de la crítica dentro de la nueva izquierda cultural (New Left) de la década de 1960. Bajo esta premisa resulta interesante explorar una entrevista con China Mieville producida por Fast Forward: Contemporary Science Fiction, una serie mensual de media hora sobre los géneros de Ciencia Ficción, Fantasía y Horror.
El autor China Tom Miéville [nacido el 6 de septiembre de 1972 en Norwich, Inglaterra] es un exquisito escritor Inglés ficción fantástica y profesor de escritura creativa en la Universidad de Warwick. Le gusta describir su trabajo como “Ficción Extraña” (weird fiction, aludiendo a principios del siglo XX y los escritores de Horror como HP Lovecraft), y pertenece a un grupo informal de escritores a veces llamado New Weird que conscientemente intente mover fantasía lejos de comerciales, género clichés de epígonos de Tolkien (Lord of the Rings). También es activo en la política de izquierda como miembro del Partido Socialista de los Trabajadores. Él se ha destacado por la Cámara de los Comunes para la Alianza Socialista, y publicó un libro sobre el marxismo y el derecho internacional. En esta entrevista, China conversa acerca de un acercamiento al lenguaje mismo y a la cognición sapiente, disectando temáticas trabajadas en su novela “Un Lun Dun” publicada en el 2007. Un Lun Dun es una novela de fantasía para adultos jóvenes el título se deriva de Un-London, esa antítesis de la autoridad en la ciudadela y el Imperio, el nombre del dominio alterno donde se encuentra el libro.
El mismo, Darko Suvin, mejor conocido por sus importantes obras de la crítica e historia literaria dedicada a la ciencia ficción trabajó en un marco explícitamente marxista. Por lo tanto la perspectiva de la teoría literaria marxista, está contribuyendo a una tradición rica y bien establecida. En 1972, Darko Suvin publicó “En la Poética de la Ciencia Ficción”, donde anunció la importancia de la ciencia ficción como “la literatura de distanciamiento cognitivo”, Suvin escribe, “es entonces un género literario cuyas condiciones necesarias y suficientes son la presencia e interacción del extrañamiento y la cognición, y cuyo dispositivo principal formal es un marco alternativo e imaginativo con el medio ambiente empírico del autor”. De esta manera, parece que la revolución sólo puede ser que también sea Ciencia Ficción, en el sentido que la trascendencia visionaria, material de la ciencia ficción ha sido el último punto del marxismo. Para el marxismo, la trascendencia visionaria es la conclusión necesaria de desmitificación astringente. No tan sólo que el sueño de la liberación surge de la desmitificación de lo real, sino también que sólo a través de un conocimiento exacto y científico de la realidad capitalista tal como existe en que podemos empezar a imaginar alternativas posibles a la actual. Este tipo de conocimiento es, después de todo, precisamente la línea que separa a los comunistas de los “socialistas utópicos” que Marx despreciaba, (los pensadores de mera expresión de deseos…) Y esto resulta ser exactamente donde Suvin comenzó: en la trascendencia visionaria (distanciamiento) como el complemento necesario de la desmitificación astringente de la supra estructura que produce realidad (cognición). No es el Marxismo y la Ciencia Ficción, a continuación, pero el Marxismo como Ciencia Ficción, o mejor aun… Ciencia Ficción como Marxismo.
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